DE LA VILLA DE CANGAS DEL MORRAZO
La "Muy leal villa de Cangas de Morrazo" como muchos otros núcleos marineros, celebra vivamente el ciclo de la Pasión de Cristo. Su Semana Santa esta considerada de Interés Turístico Gallego (2002) gracias al esfuerzo de las Cofradías de la Misericordia (ó Gremio de Mareantes), la Hermandad de los Dolores, la Asociación del Santo Cristo del Consuelo y la Agrupación de San Pedro Apóstol. Actualmente están empeñadas en que esta celebración religiosa sea condecorada como Fiesta de Interés Turístico Nacional,
La vistosidad de sus procesiones, el recogimiento de los fieles y las artísticas imágenes, hacen de la Semana Santa en Cangas, una manifestación del vivir de un pueblo marinero que a lo largo de su historia fue enriqueciendo una manera de sentir su devoción religiosa, con sensibilidad y buen gusto.
La originalidad de las imágenes articuladas, en la procesión del “Encuentro” y el “Descendimiento” son una muestra del querer vivir la Pasión de Cristo de la manera más real.
La Semana Santa en Cangas comienza ya el Viernes de Pasión con la festividad de la Santísima. Virgen de los Dolores, de gran arraigo en la Villa, hasta el punto de ser declarada fiesta local a todos los efectos. Culminan los actos litúrgicos, este día, con una magna procesión de la Virgen en un artístico "trono" bajo palio.
El Domingo de Ramos se celebra la bendición de las palmas y la Procesión hasta el Templo, con la imagen de Jesús montado en una borriquilla.
El Miércoles Santo sale la Procesión de la "Soledad de María" acompañada por Tambores Cofrades.
Son las mujeres del municipio las que acompañan la Virgen en su soledad lo por el Casco Viejo de Cangas, haciendo una parada en el "Eirado da Sinal", donde se realiza una ofrenda floral
El Jueves Santo por la tarde, sale el "Paso de la Mesa", que representa "La Última Cena", con productos naturales.
También están el paso de "La Oración en la Huerta" y el de "La Flagelación", hermoso conjunto de tres imágenes, cerrando la procesión con el "Trono de la Virgen de los Dolores" bajo palio.
El día cumbre de la Semana Santa, comienza con la procesión matutina conocida cómo “La Negación de San Pedro”. Lo más notable de esta procesión es que busca comprometer a la juventud con la Semana Santa, así la imagen de Pedro es acompañada principalmente por gente joven, y llevada alrededor de los Jardines de J. Félix Soage Vilariño.
Al mediodía se celebra en el centro de la Villa,la procesión del "Santo Encuentro". El predicador va relatando el pasaje histórico, y, de las diferentes calles que confluyen en la plaza van apareciendo las imágenes: Sao Juan, La Verónica, María Magdalena, María Cleofás, María Salomé y la Santísima. Virgen de los Dolores.
El Nazareno, acompañado del Cirineo y de sayones romanos, cae tres veces (
un sistema de articulación hace que la imagen caiga y se levante). La Verónica extiende el sudario y aparece la cara de Jesús. San Juan extiende su dedo y señala el camino a la Virgen.
Por la tarde, en el templo, tiene lugar a ceremonia del "Descendimiento", donde es "Desclavado" el Cristo y depositado en una urna de cristal. Esta preciosa imagen es articulada en sus brazos, y el acto se convierte en una escena de emotivo realismo.
Por la noche, se celebra la procesión del "Santo Entierro". Las imágenes de San Juan, las Piadosas Mujeres, el paso impresionante de Jesús Crucificado, el paso de la Piedad, la urna con el Cristo Yaciente y el hermoso trono de la Virgen de la Soledad, cierran esta procesión.
El Sábado Santo es el día de la sepultura de Jesús, el día de espera litúrgica y silenciosa junto al sepulcro. El templo parroquial se prepara para el velatorio con el altar desnudo y las luces apagadas. Las imágenes de la Santísima Virgen de los Dolores, junto con San Juan, María Magdalena, Verónica y las Piadosas Mujeres velan a Jesús.
Se respira un ambiente de fervorosa espera llena de paz y cargada de esperanza. Y como final de la Semana Santa, sale la Procesión del Silencio, a las doce de la noche del viernes, en la que el Cristo del Consuelo es acompañado en un absoluto silencio por nuestras calles.
La renacentista Ex-Colegiata de Santiago, construida en el siglo XV y reformada dándole su actual apariencia en el siglo XVI cuando fue declarada colegiata por el papa Paulo III en el año 1545, que centra el singular núcleo viejo de la villa, actúa de Calvario y Santo Sepulcro para escenificar, con rasgos de auto sacramental medieval, el acontecer de la Semana Santa. Aquí se venera la imagen del Santo Cristo del Consuelo, patrono de la villa de Cangas, obra barroca tallada en el año 1769 por el escultor de Santa Cristina de Cobres, Juan Pintos, y también otro crucificado, el de “Oficio de Difuntos” o “Cristo que no quiso arder”, del que cuentan que se salvó milagrosamente de las llamas en el incendio que sufrió la iglesia en 1617 de manos de los piratas berberiscos argelinos al servicio del turco, arrasando la población el día 9 de diciembre de ese año, y que es el confidente de las penas y alegrías de mujeres y hombres del lugar.
La originalidad de la imaginería de sus pasos procesionales, alguna de ella articulada, es la principal seña de identidad de la Semana Santa de este pueblo genuinamente marinero.
Declarada "De interes Turístico Gallego"
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Carteles Semana Santa
